Memento


Siempre me ha hecho gracia la travesura de la memoria. 

Yo no lo recuerdo así. 

Y qué cierto, cuánta verdad. Se distorsiona la historia, y aquello de lo que estabas convencida de repente resulta que fue totalmente diferente, y un recuerdo triste se transforma en anécdota. La mente juega buenas y malas pasadas, y la memoria tiene la mejor de los funciones. 

Memoria. 

Traicionera, cobarde, mentirosa. Pícara. Hace con nosotros lo que quiere. 

Cuánto dolor causa su ausencia. Distorsionada o no, estos recortes de memorias transformadas en fotografías, son el único equipaje que llevamos siempre con nosotros. Duele cuando se cae una fotografía, cuando se quema, cuando se pierde. Duele cuando dejas de tener el álbum. 

Nos agarramos con clavos de hierro a una memoria que sólo recuerda lo que quiere. 

Cuatro años. Después de cuatro años, miro atrás, y bueno. Una se asombra de sólo recordar lo bueno. Lo malo no era tan malo. La mayor perfección del ser humano es su capacidad de renacer de sus cenizas. 

Hoy iba con una grupo de caras sonrientes: emocionados, expectantes, felices. Curiosos, y llenos de deseos, frustraciones, y mucho sueños por cumplir. 

Ojalá que la memoria no me falle, y les recuerde siempre así de risueños. 


Ana 'Uala'

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